¿Qué son los triglicéridos?
Los triglicéridos son las principales grasas de nuestro organismo y componen la mayor parte de grasa de origen vegetal y animal.
Los triglicéridos presentes en nuestro cuerpo pueden ser adquiridos a través de la alimentación o producidos por nuestro propio organismo por medio del hígado. Los triglicéridos son importantes, pues sirven como reserva energética para los momentos de ayuno prolongado o alimentación insuficiente. Cuando hay un exceso de triglicéridos circulando en la sangre, damos el nombre de hipertrigliceridemia.
Los triglicéridos son la forma de grasa más común en nuestro cuerpo, y sirven para proporcionar energía al organismo. Cuando la cantidad de triglicéridos es elevada, estos son almacenados en los tejidos adiposos (tejidos grasosos) en caso de ser necesarios en un futuro. Cuando alguien desarrolla las típicas «gorduras» en el cuerpo, en zonas como el cuadril y el abdomen, en realidad está almacenando los triglicéridos que están en exceso.
Los triglicéridos están presentes en varios alimentos comunes de nuestra dieta, pero la mayor parte suele ser producida por nuestro hígado. Cuando comemos carbohidratos en exceso (dulces, pastas, panes, etc.), el hígado toma esos azúcares restantes y los transforma en triglicéridos, para que puedan ser almacenados en los tejidos adiposos, sirviendo así como reserva energética.
Los triglicéridos viajan por la corriente sanguínea acoplados a una proteína llamada VLDL, una lipoproteína semejante al HDL y LDL que transporta el colesterol por medio de la sangre.
Niveles sanguíneos
Como veremos más adelante, el exceso de triglicéridos en la sangre está asociado a la disposición de grasas en los vasos y ateroesclerosis, aumentando el riesgo de enfermedades cardiovasculares.
Todo individuo con más de 20 años debe medir sus niveles de colesterol y triglicéridos por lo menos una vez cada cinco años.
Los niveles de triglicéridos en la sangre se clasifican de la siguiente manera por el National Cholesterol Education Program, Adult Treatment Panel III (NCEP ATP III):
- Normal: por debajo de 150 mg/dL.
- Moderado: entre 150 y 199 mg/dL.
- Alto: entre 200 y 499 mg/dL.
- Muy alto: mayor o igual a 500 mg/dL.
La Sociedad Americana de Endocrinología propone una clasificación diferente, dividida en 5 etapas:
- Normal: por debajo de 150 mg/dL.
- Leve: entre 150-199 mg/dL.
- Moderado: entre 200–999 mg/dL.
- Alto: entre 1000 y 1999 mg/dL.
- Muy alto: por encima de 2000 mg/dL.
¿Cuáles son las causas de los triglicéridos altos?
Los niveles de triglicéridos pueden elevarse por varios motivos. Algunas personas presentan alteraciones genéticas que predisponen a la hipertrigliceridemia, otras desarrollan triglicéridos altos secundariamente a una dieta hipercalórica o a la presencia de determinadas enfermedades.
Entre las condiciones que más frecuentemente provocan hipertrigliceridemia están:
- Obesidad.
- Diabetes mellitus.
- Hipotiroidismo.
- Insuficiencia renal crónica.
- Síndrome nefrótico.
- Dieta hipercalórica.
- Consumo excesivo de alcohol.
- Embarazo.
El uso regular de algunos medicamentos también puede provocar un aumento de los triglicéridos:
- Tamoxifeno.
- Corticoides.
- Betabloqueadores (propranolol, atenolol, carvedilol, bisoprolol, metoprolol…).
- Diuréticos.
- Anticonceptivos.
- Ciclosporina.
- Antirretrovirales.
- Isotretinoína.
El aumento de los triglicéridos puede o no estar acompañado de alteraciones en el colesterol. Las dos situaciones más comunes son triglicéridos y LDL (colesterol malo) elevados o triglicéridos elevados y HDL (colesterol bueno) bajo. La elevación aislada de los triglicéridos, sin alteraciones del colesterol, no es muy usual.
Existen algunas formas de hipertrigliceridemia familiar que son alteraciones de origen genético, que hacen que el paciente produzca triglicéridos en exceso, independientemente de su dieta. En estos casos es posible que el paciente presente niveles graves de triglicéridos, a veces por encima de los 1000 mg/dL.
Dieta
Una dieta rica en grasas saturadas y carbohidratos es un importante factor de riesgo para la hipertrigliceridemia. Las personas con triglicéridos elevados deben evitar el consumo regular de:
- Refrescos de cola o cualquier otra bebida rica en azúcar.
- Bebidas alcohólicas.
- Dulces.
- Chocolate.
- Pan.
- Bizcochos.
- Pastas.
- Pizzas.
- Papa.
- Helados.
- Frozen yogur.
- Tortas.
- Leche integral.
- Frituras.
- Quesos grasosos.
Cuando compre comida, intenta leer las informaciones nutricionales al reverso de cada alimento y evite productos ricos en los siguientes azúcares:
- Sacarosa.
- Glucosa.
- Fructosa.
- Jarabe de maíz.
- Maltosa.
- Melaza.
Esta lista de alimentos está lejos de ser completa. Cualquier alimento rico en carbohidratos o grasas saturadas puede causar aumento de los triglicéridos. Más adelante, en la parte correspondiente al tratamiento de la hipertrigliceridemia, daremos algunas sugerencias sobre la dieta para disminuir los triglicéridos.
Síntomas
Por regla general, la hipertrigliceridemia no provoca síntomas. Es imposible saber si sus triglicéridos están altos o bajos sin realizar exámenes de sangre.
Pacientes con antecedentes familiares de hipertrigliceridemia, generalmente con valores de triglicéridos crónicamente por encima de los 800 mg/dL, pueden presentar xantomas, que son depósitos subcutáneos de colesterol, bajo la forma de nódulos o placas amarillas, que ocurren frecuentemente en las palmas alrededor de los ojos, en los pies o en las articulaciones.

Consecuencias de la hipertrigliceridemia
Aunque la relación entre triglicéridos altos y riesgo cardiovascular haya sido cuestionada en el pasado, con los actuales estudios se tornó claro que los pacientes con hipertrigliceridemia presentan un mayor riesgo de desarrollar enfermedades cardiovasculares, particularmente enfermedades coronarias.
Los niveles elevados de triglicéridos también están asociados a un mayor depósito de grasas en el hígado, provocando una alteración conocida como esteatosis hepática.
Cuando los valores de los triglicéridos están arriba de 1000 mg/dL, el paciente puede presentar un cuadro de pancreatitis aguda.
Tratamiento
El principal objetivo del tratamiento de la hipertrigliceridemia es reducir el riesgo de enfermedades cardiovasculares. Aún no se sabe si la simple reducción de los valores de los triglicéridos es suficiente para obtener estos resultados.
Por eso, el manejo de la hipertrigliceridemia debe siempre incluir modalidades de tratamiento que sabidamente son benéficas para pacientes con alto riesgo cardiovascular, como dieta balanceada, práctica de ejercicios físicos, pérdida de peso, control de la diabetes y control del colesterol LDL y HDL.
Dieta para bajar los triglicéridos
Con relación a la dieta, como ya se dijo antes, los pacientes con triglicéridos elevados deben evitar alimentos ricos en carbohidratos y grasas.
Prefiera alimentos ricos en fibras, peces y alimentos ricos en grasa no saturada y pobres en grasas saturadas. Escoja panes, bizcochos y cereales que contengan avena, granos integrales, cebada, maíz, arroz o trigo como primer ingrediente. Dé preferencia al arroz integral y a las pastas a base de trigo integral. En las bebidas, evite el alcohol y prefiera los refrescos diet. La leche debe ser desnatada.
Cuando pensamos en disminuir el colesterol LDL, lo más importante es evitar alimentos grasosos. Cuando pensamos en disminuir los triglicéridos, lo más efectivo es limitar el consumo de carbohidratos y calorías.
Medicamentos para bajar los triglicéridos
En los pacientes con triglicéridos arriba de 200 mg/dL, debe considerarse el tratamiento con medicamentos.
Es importante destacar que el uso de medicamentos para controlar la hipertrigliceridemia, de ninguna manera, excluye la necesidad de que el paciente cambie sus hábitos de vida. Si no hay control en la dieta, pérdida de peso, control de diabetes y aumento de la carga de ejercicios físicos, el beneficio del tratamiento farmacológico quedará muy lejos de lo deseado.
Si además de la hipertrigliceridemia, el paciente también tiene niveles elevados de colesterol, el uso de las estatinas, como Sinvastatina, Pravastatina, Rosuvastatina o Atorvastatina puede ser útil. Estos medicamentos actúan más sobre el colesterol, pero también tiene algún efecto sobre los niveles de triglicéridos.
Los fibratos (Gemfibrozil o Fenofibrato) son medicamentos más específicos para reducir niveles de triglicéridos, pudiendo alcanzar reducciones de hasta el 70% en algunos casos. Estos medicamentos, no obstante, no actúan sobre los valores de colesterol.
Si hay necesidad de asociar una estatina a un fibrato, el fenofibrato debe ser el medicamento elegido, pues presenta menos riesgos de interacción medicamentosa.
Los suplementos ricos en aceite de pescado (omega 3) también son efectivos para la reducción de la hipertrigliceridemia. Para que tengan efecto, las dosis deben ser elevadas, arriba de dosis de 3 gramos por día de ácido eicosapentaenoico/ácido docosahexaenoico (EPA/DHA), lo que significa al menos 4 cápsulas por día. Algunos pacientes no toleran dosis muy altas de aceite de pez, presentando diarrea y cólicos abdominales.
Referencias
- Hypertriglyceridemia – UpToDate.
- Hypertriglyceridemia: its etiology, effects and treatment – Canadian Medical Association Journal.
- Hypertriglyceridemia – Medscape.
- Hypertriglyceridemia – American Board of Family Medicine.
- Endocrine Society Releases Guidelines on Diagnosis and Management of Hypertriglyceridemia – American Family Physician.
- Hypertriglyceridemia – Nutrients.
- Evaluation and Treatment of Hypertriglyceridemia: An Endocrine Society Clinical Practice Guideline – The Journal of Clinical Endocrinology & Metabolism.
Autor(es)
Médico licenciado por la Universidad Federal de Río de Janeiro (UFRJ), con títulos de especialista en Medicina Interna por la Universidad Federal de Río de Janeiro (UFRJ) y de Nefrología por la Universidad Estadual de Río de Janeiro (UERJ) y por la Sociedad Brasileña de Nefrología (SBN). Actualmente vive en Lisboa, Portugal, tiene títulos reconocidos por la Universidad de Oporto y por el Colegio de Nefrología de Portugal.