Dolor de origen renal
El dolor de origen renal, que suele manifestarse como una molestia en la región lumbar, es una queja muy común en la población general.
Sin embargo, al contrario de lo que la mayoría de las personas cree, la gran mayoría de los casos de dolor en la región lumbar o en la espalda no es causada por los riñones, sino por problemas en la columna vertebral y estructuras adyacentes.
La lumbalgia (dolor lumbar) por problemas en la columna y el dolor renal son situaciones completamente diferentes y con causas distintas.
Excepto en casos de cálculos renales o infecciones urinarias, los riñones rara vez causan dolor. La mayoría de los pacientes con alguna enfermedad renal no presenta quejas de dolor en los riñones.
Para conocer más sobre otros síntomas relacionados con los riñones, además del dolor, lea: 10 síntomas de los riñones (enfermedades renales).
¿Dónde están ubicados los riñones?
Los seres humanos tienen dos riñones que se encuentran paralelos a la columna vertebral, habitualmente entre la duodécima vértebra torácica (T12) y la tercera vértebra lumbar (L3).
El riñón izquierdo suele estar ubicado un poco más alto que el derecho. Los riñones son órganos retroperitoneales, es decir, están situados más cerca de la espalda, detrás de la cavidad abdominal, protegidos por la parte posterior de las costillas.

Los riñones y los uréteres (conductos que transportan la orina desde los riñones hasta la vejiga) están altamente inervados, lo que permite que se perciba dolor cuando sufren alguna lesión o inflamación.
Sin embargo, esta rica inervación renal se cruza con fibras nerviosas provenientes de otras estructuras y órganos cercanos, incluyendo nervios provenientes de la piel. Como resultado, al cerebro le cuesta precisar el origen exacto del dolor. Por esta razón, no es raro que el dolor por una lesión renal o dolor ureteral se manifieste en lugares distantes, como el abdomen, los testículos o los ovarios.
En general, el dolor renal es mal definido y difuso, afectando lateralmente la región lumbar y uno de los flancos.
Causas del dolor renal
El dolor renal puede desencadenarse por isquemia renal (reducción del flujo sanguíneo), inflamación/infección de los riñones, tracción o distensión de la pelvis renal, o distensión de la cápsula que recubre los riñones.
En la práctica, esto significa que las siguientes lesiones y enfermedades renales suelen ser las causas más comunes de dolor en los riñones:
- Cálculo renal.
- Infección de los riñones (pielonefritis).
- Enfermedad renal poliquística.
- Hidronefrosis (obstrucción del flujo urinario que provoca dilatación renal).
- Trombosis de la vena renal.
- Isquemia renal.
- Cáncer renal.
- Traumatismo renal.
En general, las tres primeras enfermedades mencionadas representan la gran mayoría de los casos de dolor renal.
¿La insuficiencia renal causa dolor en los riñones?
Contrario a la creencia popular, la insuficiencia renal, ya sea crónica o aguda, no provoca dolor en los riñones. Incluso en fases avanzadas, el dolor renal no forma parte del cuadro clínico del paciente con insuficiencia renal.
Este dato es importante, ya que la mayoría de los pacientes con insuficiencia renal son personas mayores, un grupo etario en el cual los problemas de columna son muy frecuentes. Es muy común que un paciente con insuficiencia renal sufra también de trastornos en la columna, pero culpe injustamente a los riñones por su dolor.
La insuficiencia renal crónica es una enfermedad silenciosa hasta etapas bastante avanzadas. Incluso los pacientes en tratamiento con hemodiálisis no presentan dolor renal, a menos que tengan además alguno de los problemas mencionados anteriormente.
Síntomas
El dolor renal tiene características propias que varían según la enfermedad responsable de su aparición. Además del dolor en sí, los síntomas asociados ayudan mucho a esclarecer la causa.
Ejemplos:
Cólico renal
El dolor provocado por un cálculo renal, llamado cólico renal, es un dolor lumbar unilateral extenuante, posiblemente el peor dolor que el paciente haya experimentado en su vida.
Aparece de forma repentina, empeora progresivamente durante las siguientes horas y no mejora con ninguna medida, dejando al paciente extremadamente inquieto. No sirve de nada levantarse, acostarse, sentarse, inclinarse o masajear la espalda… ¡Nada funciona! El paciente se siente “desesperado” por el dolor. Son comunes los vómitos y la presencia de sangre en la orina.
El dolor del cálculo renal puede irradiarse hacia los flancos o hacia la región inguinal.
Pielonefritis
El dolor provocado por la infección renal, llamada pielonefritis, es un dolor lumbar unilateral que generalmente viene acompañado de fiebre, escalofríos, deterioro del estado general, náuseas y vómitos.
El dolor lumbar no está relacionado con la posición del tronco ni con los movimientos de la columna. Sentarse, acostarse o levantarse no afecta la intensidad del dolor, que suele ser menos intenso que el del cólico renal.
Una maniobra médica conocida como maniobra de Giordano, que consiste en una percusión suave de la región lumbar con el puño cerrado, suele provocar un empeoramiento temporal del dolor.
Enfermedad renal poliquística
El dolor lumbar en pacientes con riñones poliquísticos es más difícil de distinguir. Puede tener características similares al dolor de origen vertebral, como empeorar al caminar o con movimientos del tronco. Si los riñones están muy agrandados, ellos mismos pueden causar sobrecarga en músculos y ligamentos de la región lumbar, lo que lleva a una lumbalgia crónica.
Los pacientes con riñones poliquísticos pueden presentar dolor renal por múltiples causas, incluyendo aumento del tamaño de los quistes, ruptura o sangrado de un quiste, infección renal, litiasis renal, etc. Además, el riñón poliquístico también puede causar dolor abdominal si su tamaño es muy grande.
Diferencias entre el dolor renal y el dolor de columna
El principal diagnóstico diferencial del dolor renal es el dolor musculoesquelético de la columna lumbar, conocido como lumbalgia. De hecho, la mayoría de los casos de dolor lumbar tienen origen en la columna y sus ligamentos y músculos. Solo una pequeña parte de los casos son realmente de origen renal.
La característica principal del dolor en las enfermedades musculoesqueléticas de la columna es su naturaleza mecánica: es un dolor que empeora con el movimiento y en ciertas posiciones, pero que generalmente mejora con el reposo.
Los dolores de origen musculoesquelético también pueden causar cierta rigidez, dificultando el movimiento de la columna. Otras características comunes incluyen irradiación del dolor hacia la pierna (a veces hasta la altura de la rodilla), debilidad muscular en los pies y pérdida de sensibilidad en una de las extremidades inferiores.
El dolor de columna suele ser un cuadro prolongado, con dolor de intensidad moderada que puede durar meses o incluso años. En la mayoría de los casos, no hay otros síntomas como fiebre, vómitos, sangre en la orina, pérdida de apetito, etc.
En resumen, en general, es fácil distinguir un dolor de origen renal de una lumbalgia musculoesquelética. No solo las características del dolor suelen ser muy distintas, sino también los síntomas asociados son completamente diferentes.
Referencias
- Kidney stones in adults: Diagnosis and acute management of suspected nephrolithiasis – UpToDate.
- Pain in chronic kidney disease: prevalence, cause and management – Journal of renal care.
- Brenner and Rector’s The Kidney, 2-Volume Set 11th Edition.
- Oxford Textbook of Clinical Nephrology – 3-Volume 4th Edition.
- Ferri FF. Hydronephrosis. In: Ferri’s Clinical Advisor 2023. Elsevier; 2023.
Médico graduado por la Universidad Federal de Río de Janeiro (UFRJ), con títulos de especialista en Medicina Interna y Nefrología otorgados por la Universidad Estatal de Río de Janeiro (UERJ), la Sociedad Brasileña de Nefrología (SBN), la Universidad de Oporto y el Colegio de la Especialidad de Nefrología de Portugal.